Esa gente maravillosa

Cuando compre mi nube azul, hace dos años, un compañero de la oficina tenia exactamente el mismo modelo de auto, mismo color, cuando llegue con mi auto, por supuesto estando muy contenta por tener carrito nuevo lo mantenía limpio diariamente, (ya saben el dicho jarrito nuevo donde te pondré, ji, ji), así que no note, que un día Don German, el lavacoches que viene 2 veces a la semana a la oficina, había lavado mi auto y después dejo mensaje para el compañero para que le pagara, por supuesto se llevo una gran sorpresa, cuando le dijeron que mi compañero estaba de vacaciones - Entonces? De quien es el auto que lavé? Ya me amole! expreso Don German. Yo me entere de esto a las 2 semanas de haber sucedido, en serio mi auto siempre lo mantenía limpiecito, ni cuenta me di que lo habían lavado y me dio muchísima pena con Don German y ofrecí pagarle, pero como ya era fuera de tiempo y el consideraba que había sido un error suyo, no acepto el pago.

Hoy ando un poco complicada con mis horarios y no he tenido oportunidad de llevar mi carro al car wash y mas que azul, ya se ve gris, sin embargo le comenté a Doña Mary - la Señora que nos apoya en el aseo de las oficinas - que si venia Don German que por favor le pidiera que me lavara el auto, sin embargo no vino hoy y me voy enterando que le dijo a su compañero Jerónimo que me lavara el auto, no he ido a ver, pero me avisaron que ya quedó limpio y por supuesto me dispuse a pagarle a Jerónimo, pero no quiso aceptarlo, me apena muchísimo, no quiso aceptar el dinero que le ofrecí, le argumenté que solo le estoy pagando por un servicio que me brindó, sin embargo siguió diciendo que no y con una sonrisa amable se fue. Así que no se mañana que le voy a traer, pero aunque sea unas piezas de pan dulce, un sándwich, un refresco, pero algo va a tener que aceptarme, ya que no me acepta el dinero.

Nunca deja de asombrarme la gente maravillosa que puede hacer algo por ti desinteresadamente, y esos detalles hacen tu día mucho más agradables.