Manejando por la carretera de los recuerdos

El sábado por la mañana íbamos en carretera rumbo a Ciénega de Flores mi novio y yo, cuando entre platica y platica, fui acordándome de mil cosas, para empezar el día, los días frescos, nublados, cuando te levantas temprano me recuerda mucho cuando de pequeña viajábamos mis padres y mis hermanas, esa sensación de saber que ya pronto iríamos a la central de autobús, porque nuestros viajes siempre fueron en carretera, hasta ya adulta recuerdo empezar a viajar en avión; Tuve la oportunidad de viajar en tren, recordar la parada del tren y ver la vendimia de gorditas, taquitos, quesos, fruta y no recuerdo que más, pero esas gorditas con nopalitos, uuuyyy me trae unos recuerdos grandiosos de mi infancia o más que recuerdos son aromas y sensaciones del pasado, el ver a las señoras acercarse a la ventana del vagón con su canasta de mimbre llena de taquitos o gorditas, de esos viajes de mi niñez o la vez que de adolescente me permitieron viajar con mi prima Mariscuquis a Valle Hermoso, Tamaulipas, que era la ciudad de la mentira mas grande, porque ni era Valle, ni era Hermoso, ahí pase la mayoría de mis vacaciones de secundaria, entre los maizales, las vacas, entre gallinas, perros, gatos y conejos, me vino a la mente el gato con patas de conejo, ya no recuerdo quien lo parió si fue un gato o un conejo, pero era toda una rareza el ver al gato que saltaba con sus patas traseras y estas fueran patitas de conejo, siempre lamento no recordar nombres, porque no recuerdo los nombres de los primos de Mariscuquis, con quienes jugábamos, no recuerdo el nombre de sus tíos, pero al viajar por la carretera me trajo gratos recuerdos que estaban enterrados, el estar en una casa donde aun no habia electricidad y la bombilla se encendia con una bateria de auto y si veias por la ventana era una oscuridad total, que en la noche los adultos fueran al pueblo y todos nos quedabamos en casa contando cuentos de terror y despues una vaca mujiendo por la ventana y todos saltando del susto, ja, ja, aun siguen las lagunas mentales y en comparación con la gente que va envejeciendo y olvidando cosas, yo espero algún día seguir envejeciendo y recordar cosas, este fin de semana recuperé recuerdos, recuperé una canción de Emmanuel, el rey azul que era una de las canciones preferidas de mi prima y por supuesto la aprecie también, por la inocencia del primer amor, si me preguntan si recuerdo la ilusión de mi primer amor, creo que tenia 12 años cuando me enamoré de un adolescente que iba a cumplir 15 años, era un vecinito que ya de adulto se fue a vivir a Saltillo, Coahuila y solo fue una hermosa ilusión, me acorde que me cantó la canción de .. Que tiene la niña? de Leo Dan.

Aquí dejo la letra de el rey azul de Emmanuel

Caminando por la calle
una carta levanté
en el interior dos niños
se empezaban a querer
ella tiene doce años
es un mes menor que él
la vergüenza, la inocencia
la hacen escribir tal vez.

Como hacen los mayores
hoy dos rosas te compré
yo no sé si sirven de algo
se hizo tarde ya lo ves
para que nadie las viera
me trataba de esconder
cuando al fin dieron conmigo
castigado y sin comer.

No importa si tú
me miras yo me convierto en un rey azul
me hice una promesa hace unos días
para tocar tu mano
y no me atrevo todavía.

No importa si tú
me miras yo me convierto en un rey azul
me hice una promesa hace unos días
para tocar tu mano
y no me atrevo todavía.

Y de pronto llega el viento
a tocar a mi balcón
el silencio sabe a estrellas
las estrellas a reloj
el reloj que marca el tiempo
para que te vuelva a ver
quizás sólo sea un momento
un instante puede ser.

No importa si tú
me miras yo me convierto en un rey azul
me hice una promesa hace unos días
para tocar tu mano
y no me atrevo todavía.

No importa si tú…