Hoy ya no te pido una estrella

Ayer que fui por Angelito lo encontré muy emocionado y orgulloso con una estrellita en su frente por haber hecho bien su trabajo en el kinder, aun cuando lo bañaron, pidió que le volvieran a poner la estrella, no quiso quitársela ni para dormir, se espero hasta que su tía Paty llegara como a eso de las 11pm para mostrarle muy orgulloso su estrella.

Esa estrella me hizo recordar el año ante pasado cuando teníamos muchos problemas con su comportamiento, en ese tiempo estaba en otro kinder y mi hermana Leo lo cuidaba, basta decir que con regularidad me llamaban para tratar de ayudar a Angelito por su temperamento agresivo, un día le pedí que se portara bien en la escuela y que me trajera una estrellita - por supuesto lo tomo literalmente.

Al llegar por Angelito, mi hermana Leo me comenta la ultima novedad, Angelito y dos niños habían sido sorprendidos in fraganti, eran los tres niños catalogados como conflictivos, una niña, otro niño y Angelito, en un descuido de la maestra, - cuando estaba entregando cada niño a su respectiva madre-, abrieron el cajón de la maestra y tomaron una estrellita cada uno, entre los tres se intentaban pegar la estrella en la frente, al voltear la maestra encuentra la siguiente escena: a uno de los niños tratando de ensalivarle la frente a Angelito para pegarle la estrellita, ja, ja.

Después de eso, jamás le volví a pedir una estrella.

Este año escolar, había olvidado por completo las estrellas, hace mucho que no les doy importancia, me es mas importante verlo feliz, verlo sonreír cuando asisto a los eventos y lo veo participar en los bailables, el hacer juntos la tarea, ver como esta en la etapa de formar silabas, escucharlo contar, ver como se muerde la lengua de lado para concentrarse y escribir su nombre completo, ver su libreta de tareas y encontrar siempre comentarios positivos y abejitas trabajadoras.

Hoy ya no te pido una estrella Angelito, solo te pido una sonrisa.