Un día una florista italiana fue a cortarse el cabello con un estilista en New York. Cuando quiso pagarle, el estilista le dijo que no podía aceptar el dinero porque estaba haciendo trabajo comunitario.
Al día siguiente, el estilista se encontró con una tarjeta de agradecimiento de parte de la florista, y una docena de rosas en la puerta.
Después fue un policía colombiano, y de igual manera, el estilista no le permitió que le pagara porque se encontraba haciendo trabajo comunitario.
Al siguiente día, el estilista se encontró con una tarjeta de agradecimiento y una docena de donas en la puerta.
Después fue un cocinero MEXICANO, y de igual manera no dejó el estilista que el mexicano pagara su cuenta. ¿Adivina qué se encontró el estilista al siguiente día en su puerta..?
¡A huevooooo!...Una docena de mexicanos esperando un corte de cabello gratis !!
¡Viva México CABRONES!
De dichos, hechos y derechos desechos
-
Siempre de los siempres siempres que me recetan un nuevo medicamento
investigo de que va para saber que le meto a mi cuerpo y tener presentes
las consecue...
Hace 2 días.
0 comentarios:
Publicar un comentario