Y este Domingo celebraré mi cumpleaños y no seria mi cumpleaños sin este post que año tras año repito sin cesar, me gusta contar mi historia, me gusta recordar lo única y diferente que siempre he sido y me he sentido, tal como una espiga en un gran sembradío, creo que así de especiales somos todos, las probabilidades, las coincidencias, el destino, el tiempo, el momento, el lugar, un sentimiento, somos únicos e irrepetibles.
Y fue un 27 de Junio según cuenta mi madre que nació una hermosa bebe, regordeta y preciosa o sease yo, todo sucedió muy deprisa, mama llega a la Clínica 4 de IMSS ubicada en Guadalupe, N.L., ya con los minutos contados, pues ella siempre lo hacia así, ya a punto de dar a luz se iba al hospital, no le gustaba que la mantuvieran tanto tiempo y eso de “regrésate aun no estas lista” no era lo de ella, ella sabia cuando estaba lista y era su momento, llega al hospital, la preparan y antes de entrar a labor de parto decide ir al baño, en eso un gran escándalo, doctores y enfermeras corriendo de un lado para otro, una mujer desmayada, otras dos a punto de un infarto, y como música de fondo el llanto de un bebe, una hermosa nena había llegado al mundo.
Pero como? Donde?, cuando?… donde ustedes menos se imaginan: en el inodoro, retrete, sanitario o mejor conocido como trono, con esta ultima palabra relaciono el porque me dicen princesa, mmm no lo había visto desde este punto de vista
– eviten las risas burlonas, por favor y guarden compostura que estoy contando un gran secreto de mi vida, ya que este trauma lo he tenido desde mi infancia, me ha acompañado a lo largo de mi adolescencia y aun en mi madurez es muy doloroso platicarlo, snif, snif – después de acordarme de este suceso saque en conclusión que yo creo que por eso tengo cara de asustada, no es para menos, se imaginan el susto de mi vida al salir del vientre de mi madre y lo primero que vi fue un charco de agua, digo todo mundo lo primero que ve es la cara del doctor – cosa que de igual manera ha de ser traumatizante - pero yo no, así que creo que eso me marco toda mi vida y no solo el haber nacido así, si no la compañía que pude haber tenido una vez haber caído en el sanitario, tal vez fue una mentira piadosa, pero mi madre dice que estaba limpio el inodoro, ve tu a saber si lo dijo para que no me traumara o por la vergüenza de que su bebe hubiese estado conviviendo con materia putrefacta procedente de sus intestinos. Aun sigue contando mi madre que fue tan rápido, que solo sintió un cólico, pues ella estaba concentrada en evacuar y que siente que sale algo de su cuerpo y no era precisamente excremento, no se si eso me dejo un complejo y por eso a veces me siento como tal, snif. Comenta que me tomo en sus brazo y no alcance a tocar la porcelana de la taza del baño, alguien puede creerlo?, me han hecho estudios para verificar que mi cerebro funcione correctamente, bueno mi IQ de 165 lo demuestra no hubo daño cerebral, hasta el momento supuestamente funciona de lo mejor, mmm el tic que me quedo, la joroba que me salio, los ojos bizcos, no se si fueron producto del golpe, pues supuestamente no hubo tal golpe, entonces ha de ser la herencia de mis padres.
Muchas veces pienso que esto lo invento mi madre, no se si para maltratarme psicológicamente o para que me convirtiera en el blanco de las burlas de mi familia o puedo creer que definitivamente sea cierto y después de acontecido mi alumbramiento, fui la atraccion del momento, enfermeras y medicos visitaban a mi madre en su habitación solo para constatar si ese bebe era el que habia nacido en la taza del baño, creo que mi mama cometio un error, puesto que si se hubiera puesto lista y hubiera cobrado la entrada a cada persona que queria ir a verme, hoy tuviera un buen fideicomiso.
De nueva cuenta dando gracias por estar aqui, en las situaciones que Dios haya designado que llegara, pero aqui estoy con el mismo proposito de siempre, solo ser feliz.
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Ángel
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Angelito
Algunas veces me doy cuenta que mi camino aun es largo, cuando una jugada en el futbol no se da, alguien golpea la mesa y yo siento un nudo en la garganta, esos sentimientos de mi vida pasada no me gustan, los odio, ya quisiera que se hubieran ido y no regresaran.
Buscando una nueva imagen para mi firma, ja, ja.
Un jueves tan común, como corriente, mi teléfono grita (digo timbra) como regularmente cada tres minutos
- No
