Baños de Pueblo

Pues si amigos, Ángel se ha escapado del cielo y de vez en cuando baja a la tierra y ahora si me toco darme baños de pueblo.

Regularmente si tengo que hacer una compra, zapatos, ropa, etc. Voy a un mall y ahí encuentro todo, que a veces es un poco mas caro, pues si, pero por la comodidad y tranquilidad al hacer las compras en un solo lugar, es mas fácil y practico para mi, pero al andar con la familia adoptiva que busca la economía, hay me tienen de polo a polo buscando las ofertas del día.

El día comenzó como siempre muy bien, desperté y después de una hora me dije con este frío naa mejor me vuelvo a dormir y hasta el mediodía abrí mis ojitos, antes sufría de insomnio, así que para mi el sueño es algo sagrado y cada día vuelve a mi con una tranquilidad deliciosa y dormir hasta mediodía es un evento de gran alegría.

Por fin me pongo las pilas y comienzo mi día lavando, snif, pero es solo programar la lavadora, ji, ji ni para que quejarme y ahora si patitas para que son y a salirnos a la calle, la agenda un poco agresiva, pero había que cumplirla y mas al salir después de mediodia.

- Ver a Angelito en casa de su padre, dejarle uno de los pans que le compre y aparte dejar las indicaciones pues a la psicóloga tenia que ser llevado en la tarde
- Comprar la tela, pues hoy voy a hacerla de costurera para hacerle la toga roja para el evento donde cantara villancicos
- Comprarme unas sexy botas cafés
- Mi sobrina surtirse de ropa de maternidad
- Mis sobrinos unas botas y/o zapatos aun estaban indecisos

Así que bajo a la tierra y me dejo guiar, vi a mi pequeñito me dio un abrazo, varios besos y muchas sonrisas, ya con esa recarga de energía le seguimos en la travesía

Como el plan era ir a la pulga mitras, pues para ir a comprar la tela de la toga y no ir hasta Padre Mier, mi hermana me ubica y vamos a Colon y Cuauhtemoc….. uuyyy me daba miedo, ja, ja, no es por nada pero como Ángel que soy yo creo que es mi resplandor, porque todo mundo voltea y me mira y digo soy igual que el resto de la gente, las alitas se hacen trasparentes, así que no las pueden ver, la aureola la guardo en la bolsa, tampoco se ha de notar, pero al caminar siento las miradas, me hago la occisa y finjo demencia como si no lo notara, mientras tanto voy observando todo lo que veo a mi paso

Vi varios bares, algunas fondas, la charca del sapo, un local que estaban remodelando y pintando de rosa y afuera un gran arco iris, los aromas del pueblo, olía a taquitos, caldo de res, a cigarro y a cerveza, los sonidos del pueblo, de pásele, pásele y mucha alegría, una tiendita muy típica que vendía peltre y me llamo la atención los comales y los molcajetes, vi unos molcajetes pequeños preciosos y le dije a mi sobrina pues mi sobrino no iba con nosotros quien aferrado a comprar una licuadora, anda Mina ahí están los molcajetes, llevale uno a Javier para que no se queje.

Seguimos caminando y no deje de sorprenderme, gente de pueblo que me encontraba, vestidos con sombrero y botas, algunas mujeres con minifalda que si se agachaban se les veía la espalda, un señor bigoton, una señora con barba, unos jóvenes greñudos y otros vestidos de negro de la cabeza a los pies cual seres oscuros.

Por fin salí con la compra preciada de telas brillosas e hilos de seda para laborar la toga de mi pequeño Angelito.

De ahí me ubica mis sobrina y nos incorporamos a Ruiz Cortines hasta encontrar Gonzalitos y llegar a la pulga mitras, gente y mas gente seguía viendo, me compre un vasito de fruta que delicioso, seguía maravillada viendo a mi alrededor tanta vendimia, por fin encontré unas botas preciosas hechas en China, encontré un saquito de pana que me chuleo la empleada y me lo deje puesto haber si así con disfraz me seguía confundiendo con la gente y por ultimo compre un suetercito sencillo y mis sobrinos casi no compraron nada y lo que habían ido a buscar no lo encontraban.

Seguimos la travesía, mi cuñado se rajo y se regreso a casa en la nube gris que era de Ángel hace un año, así que en mi nube azul iba toda la familia adoptiva, llegamos a Juan Ignacio Ramón y Juárez y otra aventurita, de ahí nos fuimos a comer a Tortas Valle un lugar escondido e igual me maravillo, una fonda muy mona y muy rica la comida, por fin vamos a una tienda y a una zapatería, no se de donde salía tanta gente pero parecía invasión de cucarachas, ya me daba miedo que por mi tamaño no me vieran y terminara pegada a la suela de un zapato, ja,ja, por fin todos salieron contentos con sus compras deseadas y su tía adorada con un dolor de cabeza, pero igual no me quejaba, baje a la tierra y me di baños de pueblo y vaya que me hacia falta y no me quejo al contrario lo aprecio porque estoy viva y le doy gracias a Dios por toda la travesía.