Crecer - Madurar

Muchísimas veces hablo de crecer, que para el caso podría decirse madurar, soy buena dando consejos, soy buena apoyando, pero no soy buena para seguirlos, bueno eso es normal, como dicen “candil de la calle, oscuridad de la casa” y aquí les quiero compartir algo de una persona que conozco, que a veces me pide algun consejo y que tambien me aconseja y por supuesto creció y maduró.

Bueno este post es para mi cuñado Carlos que con mucho cariño y respeto les relato, Carlos fue criado solo por su padre quien para variar era alcohólico, su madre salio huyendo de los golpes recibidos y a pesar que lloraba por sus hijos, no le fue posible llevarse a los dos menores, Carlos y Quini, Carlos no estudió, se crió en las calles, era el bravucón de la colonia de al lado, andar en pandillas era lo normal para el, sin embargo como cualquier carbón (dije carbón, no cabrón) que ves en la calle, bajo toda esa fachada existía un diamante en bruto, mi hermana lo vio, reconoció su valor y se enamoró, no le importo las diferencias y consecuencias, no digo que existieran diferencias de clases, pues somos clase media fregada, si no de educación, simplemente una familia educada muy rígidamente como fue la mía, bueno que podían pedir si tenían que cuidar y criar a cinco mujeres, nada molestaba mas a mi madre que ver a un jovencito pandillero, de camisa y pantalón de una talla mas grande y el cabello largo, con tatuaje en los brazos, para nada el príncipe idealizado para su hija verdad.

Con el tiempo, mi hermana se embaraza, mi cuñado negando la paternidad, primer año casados y primer año separados, la vida de mi hermana no fue fácil, sin embargo ahí estábamos las demás hermanas apoyándola -no hablo de mi madre, pues ya saben que ni fu, ni fa a veces- fallece el padre de Carlos de cáncer y su madre regresa a casa a cuidarlo sus últimos días de vida, (admirable de esta mujer lograr perdonar el daño que ese hombre le hizo en su vida), ahora mas fuerte, logro poner en línea a sus hijos, el tiempo transcurrió mi cuñado y mi hermana empezaron su familia, al llegar su segunda hija mi cuñado se corto el largo cabello y cambio su vestimenta, solo porque asi lo prometio a la virgen de Guadalupe, su forma de hablar nunca ha sido un problema, es educado y un hombre que admiro mucho por el apoyo que siempre le brinda a mi hermana, hay momentos en que se ha quedado sin trabajo, sin embargo como hombre responsable siempre lleva el sustento a casa, aprendió muchísimas cosas con mi padre, pues mi padre era de la generación anterior, de esos que saben hacer todo en casa, desde realizar una instalación eléctrica, plomería, hasta hacer una casa con sus propias manos, el domingo busqué a mi hermana y no la encontré estaba en la iglesia y el cuidando a los peques.

Después de un rato platicando, nos decidimos y fuimos a ver su casa, así es su casa, esa casa que le costara (un egg) pagarla, pero con orgullo me mostraba, que es de un solo piso que solo tiene una recamara y una media alcoba, sin embargo me platicaba de sus planes y sueños, me quede viendo a ese chico pandillero, ese bravucón, si ahora lo vieran no es la sombra de lo que era, ahora es un hombre de familia, alguien que se preocupa por sus hijos, por su educación pues el solo estudio primaria, ese hombre en verdad le admiro que con tranquilidad lo puedo encontrar algunas veces lavando ropa o trapeando la casa y sin pena alguna, pues no se le cae absolutamente nada ayudándole a mi hermana en las labores de la casa y si dijeran lo convirtieron en un mandilon, el se reiría y con su cerveza al lado yo creo que simplemente se las mentaría.

Ese es mi cuñadito, el más pequeño, el esposo de mi hermana Leo y que el domingo le eche muchas porras, pues Bendito Dios ya consiguió un buen trabajo y es su primera semana de trabajo.

Existen hombres que nunca maduran o cambian su forma de pensar o de ser, creyendo que están en lo correcto, un verdadero hombre reconoce sus errores, pide perdón y cambia su actitud y sigue adelante.

No se trata de perfección, se trata de ser solamente humano, un ser humano que como todos cometemos errores y seguiremos cometiendo errores en la vida, pero lo principal es reconocerlos y seguir adelante, aprender del pasado, dejarlo ir, vivir el presente y ver el futuro.