Karma, suerte o coincidencia

Hace muchísimos años, para no sacar tantas cuentas dejémoslo hace 15 años, estando en mis años mozos, existía un trío de muchachas, que se la pasaban platicando sentadas a la banqueta de su cuadra hasta las 12 de la medianoche, hasta que alguna de las madres de esas tres muchachas les llamaba para dormir, aun cuando al día siguiente dos de ellas trabajaran y una estudiara.

Eramos de diferentes edades, nunca coincidimos el estar en el mismo colegio, pero no importaba, nos complementábamos como hermanas, reíamos, bromeábamos, siempre existía algún tema de conversación, había fiestas, bailes, reuniones con amigos, los amigos del hermano de Paty también se reunían, eran días en que no medias peligros, en que no existía balaceras, secuestros, podías caminar o patinar (pues nos encantaba patinar) por entre las colonias que aunque hubiera guerra de pandillas no te afectaba, pues éramos un grupo distinto a los demás, no éramos problemáticos, no teníamos una identidad definida como para decir que fuéramos parte de una pandilla, simplemente éramos amigos, de aquellos que se iban de paseo a la Expo, que salían a la Kermes de la Iglesia, Que iban a la feria, que no les faltaban invitaciones a las quinceañeras, esas tres amigas salían de viaje juntas y confiaban en ellas aun cuando todavía no eran adultas.

Y así pasaba el tiempo, ninguna tenia mas de dos años trabajando, así que tampoco contábamos con recursos para andar en auto, así que en aquel tiempo conocía las rutas de los camiones, existían aquellas peseras en las cuales parecíamos sardinas enlatadas, llegabas a tu destino con el cuello adolorido pues si no alcanzabas asiento no importaba, como quiera entrabas a fuerza pero entrabas.

Tiempo despues, en mi caso cambie de trabajo, pero estaba tan cerca que en 15 minutos podía llegar caminando y para regresar era ilógico tener que tomar dos camiones cuando estabas tan cerca, así que nunca faltaba un compañero que me dejara en la avenida y así solo caminaba una cuadra para llegar a casa, regularmente, ese compañero podía ser alguna persona mayor y por supuesto nunca era el mismo, si no aquel que me encontraba en el camino y amablemente me decía anda yo te llevo y sucedió lo que muchas veces, alguien lo vio mal, un día de tantos me vieron bajar de un auto y así sin mas corrió el chisme, que la señorita linda y niña perfecta andaba con un casado y después todo cambio, un día una de mis amigas ya no salio a platicar, la buscábamos y la negaban, simplemente su madre decidió que ya no se juntara con nosotras y mi otra amiga Paty me pregunto, si ese chisme era verdad? y me dijo el porque a Nelly ya no la dejaron juntarse con nosotras, y ese trío se volvió un dúo y con el tiempo mi amiga Paty se caso y se fue a EEUU y yo seguí ahí en esa colonia viviendo mi vida, trabajando y estudiando.

Hoy en día he vuelto a ver a Nelly y me saluda amablemente, no creo que ella olvidara nuestra amistad, todo lo que vivimos juntas, todas las aventuras, las vacaciones que pasamos en Michoacán, las salidas del grupo de amigos de la cuadra, el patinar juntas, no lo creo, sin embargo me saluda un poco avergonzada, sus ojos me piden una disculpa, sin embargo solo nos saludamos socialmente en alguna reunión que coincidimos.

Hoy en día su madre me trata y me conoce mejor, sin embargo aun me pregunto si aun recordará lo que para mi es un amargo recuerdo, la perdida de una amiga, porque según se el retirarme su amistad fue por protegerla, ya que yo podia ser una mala influencia, no se si existe el karma, si solo sea suerte o coincidencias, pues hoy en día mi ex amiga Nelly tiene dos niños de una relación con un hombre que en su momento estaba casado, pero Bendito Dios su madre la protegía y yo no la corrompí con mi comportamiento impropio, que ironía.