¡Que oso papi!

Y el premio es para:

Un día en el KFC en el “drive thru” o sea, tu me entiendes, vamos a comprar pollo, cuando nadie atiende, empieza el papi… Coronel… Coronel… Coronel…. ¡Que oso papi!, cuando se escucha la voz de la empleada, un momento por favor, en un minuto le atiendo, después de eso, osea nos queremos morir de vergüenza al pasar a la ventanilla a pagar.

Otro día estamos en Interplaza, cuando vamos por las escaleras eléctricas, delante nuestro va un chico con una back pack y se ve que es técnico en computación, por los cables y artículos que se dejan entre ver, empieza el papi.. una bomba, una bomba, tenia una semana que había pasado lo de las Torres Gemelas, el chico se pone colorado y no haya a donde escapar, yo me imaginaba que venia el guardia y lo arrestaba, osea papi, que te propones

En otra ocasión en un semáforo, en la época de los 80's estaban vendiendo el muñeco de “el nene consentido” si ese de la Familia Sinclair de Dinosaurios, a papi se le iluminan los ojos, el vendedor ambulante se acerca gustoso, cuando el papi empieza a cantar: “Soy el nene, el consentido…. “ che papi, no le compro nada.

En una ocasión estábamos en la gasolinera, cuando el papi ve por el espejo lateral y empieza a hacer cariños, “chiquito, precioso, que lindo, papito” cabe mencionar que los cariños eran para Samy que se encontraba en el asiento trasero de la camioneta, pero quien también estaba a la vista era un señor que se había salido de su auto para cargar gasolina, osea el señor ya estaba colorado, que tal si le hubiera agradado el papi y ya hasta una cita le hubiera dado

En Navidad comienza a cantar los villancicos, "pero mira, como mueren los peces en el río" y que oso cuando Vanesa de dos años de edad empieza a cantar ese coro depresivo.

La ultima ocasión estábamos en el metro, cuando el papi le hace la parada ante la espera de otra línea, el papi escucha música salsa y toma a mami de la mano y empiezan a bailar.

Hoy el papi anda suspirando y melancólico, pues su mami esta en Dallas, Tx. Pero no por eso dejamos de madrearlo en la sobremesa.